Aprende a mejorar el balance entre trabajo y vida personal

En algunas ocasiones, equilibrar el trabajo y la vida personal no es tarea para nada sencilla. Ambos aspectos son tan importantes para todos que hay momentos donde se pasa por alto alguno de ellos, lo cual puede derivar en muchos inconvenientes. Por esta razón, te daremos algunos consejos para crear un buen balance entre el empleo y la vida diaria.

La importancia del balance entre el trabajo y vida personal

Los beneficios de crear un equilibrio entre el empleo y la vida diaria radican en términos de salud. Los expertos han demostrado que poner cada cosa en su lugar trae efectos positivos para la salud mental y física. Además, tendrás un mejor desempeño profesional al establecer un horario optimizado.

Estas ventajas son aplicables tanto para el dueño de la empresa como para todo el personal que trabaje en la organización. Se reducen al máximo los niveles de estrés, lo que redunda en un mejor desempeño en las labores productivas. A la vez, los integrantes de la empresa contarán con más entusiasmo y motivaciónpara trabajar.

Sin embargo, sabemos que en vista de la alta demanda del mercado y la competencia que existe, no siempre es fácil lograrlo. A continuación, explicaremos algunas estrategias que seguramente te serán de utilidad.

Desconéctate de la empresa

Independientemente del tipo de negocio que lleves, tener un horario establecido y cumplirlo es indispensable. No obstante, el acceso inmediato al correo electrónico y la mensajería instantánea crean expectativas no saludables sobre disponibilidad en cualquier lugar y a toda hora.

Por consiguiente, a pesar de que hayas culminado con la jornada de trabajo, es posible que sigas recibiendo mensajes a través de tus dispositivos móviles. Apagar el teléfono y todos los medios de comunicación te ayudará a reducir el estrés. De hecho, es apropiado disponer de correos electrónicos y números telefónicos distintos para el trabajo y la vida personal.

Olvida el perfeccionismo

Uno de los causantes principales de las horas extras es el perfeccionismo, un pensamiento que es bastante nocivo. Ese tipo de tendencia es muy fácil de desarrollar, pero también complicada de eliminar. Debes recordar que todos somos seres humanos imperfectos, así que hacer un trabajo sin errores es prácticamente imposible.

Claro está, no queremos decir que exista el derecho a ser irresponsable y no solucionar las fallas más importantes y notorias. Nuevamente, el equilibrio es una cualidad imprescindible.

Meditación y ejercicio

Los expertos en salud recomiendan realizar ejercicio por lo menos tres veces a la semana. Hay una gran variedad de deportes para escoger, desde caminatas hasta paseos, pasando por levantamiento de pesas. En el mismo sentido, alimentarse y asearse de la manera adecuada mantiene la salud en un estado óptimo.

Tómate un tiempo cada día para dedicárselo a tu cuerpo, ya sea a nivel físico o emocional, sin importar la hora en que lo hagas.

No perder tiempo

El tiempo siempre ha sido uno de los recursos más valiosos, incluso superior al mismo dinero. Para nadie es un secreto que hay muchas cosas que te hacen perderlo, y muchas de ellas son prescindibles. Por lo tanto, hay que establecer prioridades, tanto en la vida cotidiana como en el trabajo.

De dicho modo, podrás determinar cuáles son las actividades que realmente son importantes, y aquellas que no aportan nada de valor.

Empieza poco a poco

Cada vez son más las personas que se convierten en multitareas, pensando que es algo beneficioso. Al fin y al cabo, creen que van a gastar menos tiempo y conseguir más cosas a la vez. No obstante, querer hacer todo a la vez crea más estrés en tu cuerpo a nivel mental y muchas veces físico.

Por si no bastara, tampoco te permite realizar de manera efectiva todas las actividades. Es preferible empezar poco a poco, dividir las tareas y crear un horario para ejecutar las de la forma correcta.

Delegar tareas

Es un aspecto relacionado con el anterior, pero que también consiste en la confianza que tengas con otras personas. Probablemente pienses que si haces todo por tu misma cuenta los resultados serán más satisfactorios. Es cierto, quizás tengas habilidades que garantizan un gran desempeño.

Pero si esto significa atentar contra tu salud o vida familiar, no será una acción muy beneficiosa que digamos. Busca personas de confianza que puedan cumplir con otras tareas que no tengas que hacer tú obligatoriamente.

¿Existe un equilibrio perfecto entre trabajo y vida personal?

Lamentablemente, la perfección no existe, y ya lo hemos dejado claro en este mismo artículo. En algún u otro momento, tendrás que sacrificar algo del trabajo o cierta actividad de tu vida privada para poder dedicar ese tiempo a otro propósito.

Por ejemplo, hay reuniones y eventos especiales en la familia que necesitarán que faltes al trabajo. De la misma manera, estar participando en un proyecto especial en la empresa podría derivar en que llegues tarde en algunas ocasiones a casa.

Trabajar de forma productiva, salir temprano y tener mucho tiempo libre es lo que todos quisiéramos. Claro está, vivimos en un mundo donde la realidad es diferente.

Busca un buen balance entre empleo y vida diaria

Aunque no es posible disfrutar de un equilibrio laboral y personal de ensueño, sí tienes la oportunidad de mejorarlo al máximo. Si aplicas las sugerencias anteriores, ganarás una mejor organización del tiempo y serás una persona más productiva y saludable.